Los puentes de Madison

Según pasan las horas, los días, los meses y los años, aquí me encuentro volviendo una y otra vez a pensar en tí. Mirando hace unos días unos reels que ahora son muy vistos, veía una linda historia de amor en donde les sucedía lo mismo que nos envolvió a nosotros. En el desenlace, la fuerza de las miradas fueron tan contundentes que no hizo falta palabras. Estaban allí, los dos parados, mirándose frente a frente, sabían que esa despedida era una renuncia a ser felices en sus vidas, a recordarse eternamente, a ser parte de la historia mas bonita de sus vidas que les contarán a sus hijos y hasta a sus nietos. La vida tiene eso de tan hermoso, que te muestra el sabor más rico de helado y no lo puedes volver a saborear porque era una edición limitada, tan limitada como única. Por más que la vuelvas a buscar en todos los puestos de helados, por más que mires en todas las calles, en todos los puntos del país, no lo volverás a probar porque fue algo tan particular, tan exquisito que a veces la vida te lo hace recordar a travéz de un aroma similar, de una escena particular…Y ahí, en ese aquí y ahora, lo vuelves a sentir, te vuelve a atrapar, te abraza por un brevísimo instante y lo agradeces, repitiendo la triada seguidita “gracias, gracias, gracias “ porque sabes que es efímero, porque se te escapa, se te escurre y suspiras. Así de breve fue lo nuestro, como un suspiro, pero quedará grabado en mi alma de por vida. Quizás es absurdo que aun te recuerde con tanto esmero, quizás yo en tu vida sea una página más que diste vuelta luego de cinco intensos meses, probablemente ya ni me recuerdes o quizás lo vivas como yo tan vivaz y fuerte. ¿Quién sabe eso? La vida que da tantas vueltas, algún día me permitirá mostrarte mis apuntes, mis archivos, mis recuerdos para que te sonrías y vuelvas a decirme “no te vayas a enamorar vos de mí, porque yo soy inolvidable” luego de que yo te lo dijera. De qué sirve ahora recordar con tanta precisión quién fuiste tú en mi vida….sirve y mucho, me respondo enseguida, porque aún hoy, te recuerdo y me sonrío, te siento cerquita con nuestras canciones compartidas, me levanto recordando tus consejos de confianza, fortaleza, voluntad y esmero. Aunque si me preguntaran que pediría como un deseo fuerte e intenso, es que vengas a darme un abrazo, que tus ojos miren a los míos, que te incandile, que aprecies mi cabello, y bailemos un poquito…. 11/10/2024